En el día 22 de enero de 2010, empezará en Lisboa un juicio contra once personas, detenidas en el contexto de la represión policial de una “manifestación anti-autoritaria contra el fascismo y el capitalismo” realizada en Lisboa el 25 de abril de 2007. Estas once personas son acusadas de “agresiones, injurias agravadas y desobediencia civil, y pueden ser sancionadas con penas de entre 6 meses y 5 años de prisión.
La primera sesión del juicio se realizó el pasado 7 de diciembre por la mañana, sin embargo ha servido casi únicamente para que el juez aplazase el juicio para 22 Enero debido a un fallo del tribunal en las notificaciones a los acusados. También fueron marcadas las sesiones para audición de testimonias que se prolongarán por los próximos cuatro meses.
Increíblemente, el Campus de Justiça de Lisboa fue completamente ocupado por policías de uniforme y de paisano, en una gigantesca operación destinada a intimidar los procesados e a disuadir cualquier forma de protesto. Funcionarios del Tribunal intentaron impedir ilegalmente el acceso a quien quería asistir al juicio y en las cercanías del Tribunal transeúntes eran identificados y revistados. No obstante este aparato policíaco, 30 bravos compañeros se concentraron con una pancarta de apoyo delante del campus judicial, situado en una de las zonas más ricas de Lisboa.
Debemos subrayar que, a pesar de la campaña contra los “anarco-radicales” que la policía ha emprendido en la prensa en los últimos dos años con episodios repugnantes de difamación de los procesados, ni un solo representante de la prensa burguesa compareció para hacer el reportaje del juicio. El juicio mediático ya fue hecho, ahora hay que consumar la farsa judicial en secreto...
Origen de este caso
El origen de este proceso remonta al día 25 de Abril de 2007, cuando se ha realizado una manifestación anti-autoritaria contra el fascismo y el capitalismo en Lisboa como respuesta a la fuerza creciente de la extrema-derecha en aquel periodo. El mensaje de esta manifestación, realizada en el aniversario de la caída del régimen fascista en 1974, estaba muy clara: contra el fascismo, pero también contra el capitalismo y la autoridad.
La manifestación empezó a las 18 horas y reunió más de 500 manifestantes, algo poco habitual en Portugal para una manifestación con tal contenido anti-autoritario y anticapitalista.
La policía acompañó el recorrido de la manifestación pero no intervino hasta su final en el Largo de Camões. Después del final de la manifestación, un grupo de 150 personas continuaron su recorrido a través del barrio de Chiado. En la Rua do Carmo (Calle del Carmo), sin cualquier aviso, los policías antidisturbios bloquearon las dos salidas de la calle y empezaron a avanzar, agrediendo toda la gente, incluyendo meros transeúntes.
En consecuencia de esta intervención policial, muchas personas quedaron heridas y once personas fueron detenidas. El Comando de la PSP (Policía de Seguridad Pública) empezó inmediatamente una campaña en los media de forma a justificar la brutal intervención de los antidisturbios, afirmando que los manifestantes estarían atacando a personas y bienes, que se encontrarían preparando cocktails molotov y que la policía solo intervino después de varios avisos explícitos para dispersar los manifestantes.
Nada de esto es verdad. La policía no intentó dispersar a nadie. Sólo querían golpear a los manifestantes. Aquellos/as que tuvieron la mala suerte de caer en suelo fueron duramente agredidos con los bastones y botas de los antidisturbios. Se ha incluso oído a un de los jefes de la policía presente en el local gritando a sus colegas “¡Peguen a esos comunas de mierda!”. La persecución de los manifestantes continuó por las calles de la Baixa de Lisboa. El número de personas heridas ha sido imposible de cuantificar. Cualquier agresión contra la policía fue sólo el resultado de legítima auto-defensa.
Porque estamos en total solidaridad con las motivaciones y contenido de la manifestación de 25 de Abril de 2007 y porque los procesados en este juicio podrían ser cualquier/a un/a de nosotros/as, hacemos un apelo a la solidaridad internacional contra esta farsa judicial que tendrá lugar en Tribunal del Parque das Nações en Lisboa, en los próximos meses.
AIT – Sección Portuguesa
